PEQUEÑOS ESCRITORES


EL CUENTO DE CELIA



Una poesia hecha por todos.


Tengo un ratón 

en el comedor.

Y una hormiguita

en una sillita.


Tengo un colorín

medito en un calcetín.

Y un gato

en un zapato.


Tengo una mariquita

debajo de mi camita.

Y un dromedario

metido en mi armario.


Tengo un elefante

que lleva guantes.

También un jabalí

comiendo anís.


Tengo una foca

que se tapa la boca.

Y una iguana

con una rana.


Tengo un conejo

encima de mi cama.

Y un cocodrilo

con pijama.

3ºB.

 
 

 

    EL GIGANTE LLORÓN


Había una vez un gigante llorón que vivía en una cabaña de madera con su peluche.

Él todos los días se iba al pueblo para comprar comida , pero un día todas las personas se asustaron de él. Entonces echo a correr hasta que llego a su casa y empezó a llorar y a llorar ...

Las personas del pueblo sintieron al gigante como lloraba y tanta pena les dio que fueron a consolarlo. Vieron que era el gigante tan bueno que ya no tenían miedo de él. Desde entonces el gigante ayudo a las personas del pueblo a plantar, regar y recoger sus cosechas. También el gigante ayudaba a las personas en las tareas domesticas: hacia las camas, lavaba los platos y la ropa... También llevaba a los niños al colegio y hacia la comida para todo el pueblo. La gente estaba muy agradecida con el gigante por su gran ayuda.

Pasaron los años y el gigante seguía ayudando al pueblo aunque era muy viejo. Al cabo de unos días el gigante se puso enfermo y toda la gente del pueblo fue a verlo. Todas las personas se pusieron a llamar al mejor médico del mundo y a conseguir dinero para poder pagarle.

El doctor llego al pueblo y fue a la casa del gigante para poder mirarle, vio que estaba tan grave que tuvieron que llevarle al hospital y como no cabía en la ambulancia tuvieron que llevárselo en un camión.

Al gigante le operaron y se lo llevaron al pueblo. El doctor dijo a las personas que tenia cáncer y que iba a morir pronto .

Al cabo de tres días fueron a su casa y vieron que estaba muerto.

Se pusieron todos de luto y le hicieron un buen funeral.

Cuando paso una semana el alcalde decidió hacer una estatua en honor al gigante.

El alcalde se puso manos a la obra y llamo a toda la gente para que pusieran un poco de dinero para hacer la estatua más grande de la historia ¡Hicieron la estatua de oro mas grande del mundo ¡

Desde entonces siempre se acordaron de la gran ayuda que les presto su amigo el gigante.

FIN

Mercedes y Lara 4º A